Copago hospitalario
La pasada semana la ministra de sanidad Ana Mato aparándose en su política de
recortes le dio una nueva vuelta de tuerca a la sanidad, creo que es un salto
cualitativo para que la protección sanitaria en los casos más graves y que la
destrucción de la sanidad universal base del estado de bienestar. Se trata de
la introducción del copago por parte del enfermo del copago del 10 % de los
medicamentos muy elevados de precio de dispensación hospitalaria
para 42 enfermedades graves para pacientes que no tienen más remedio que seguir
un tratamiento para luchar contra enfermedades como el cáncer o la
Hepatitis C.
Una lucha que conlleva un gasto no sólo en los medicamentos
sino también, en muchos casos, de atención absoluta de un familiar y
desplazamientos a las ciudades donde existen los hospitales preparados para el
tratamiento decisión en contra el criterio de la Organización Mundial de la
Salud (OMS), que indica que nadie ha de quedar excluido de la atención
sanitaria por razones económicas"
La ministra alega que son pequeñas cantidades que no afectan
a la economía del paciente y que se ha limitado hasta un coste máximo algo mas
de 4 euros por envase. Hay enfermos crónicos que consumen más una decena de envases
distintos. Teniendo en cuenta que estas
enfermedades no eligen el estado financiero del enfermo pueden hacerle un
boquete tal al bolsillo de determinadas personas que no tengan más remedio que
renunciar a los tratamientos por no poder pagarlos.
Multitud de asociaciones médicas y hasta 9 comunidades
autónomas se han rebelado contra esta medida y ya han asegurado que seguirán
dispensado estos medicamentos de forma gratuita como Cataluña, País Vasco o
Comunidad Valenciana, para que nadie se quede sin los medicamentos"
Se dá la circunstancia que el ahorro con esta medida va a
ser escaso ya que por ejemplo el consejero catalán de sanidad Boi Ruiz dice que
la aplicación de esta medida solo iba a representar solo un ahorro de 500.000
euros, lo que desde su punto de vista del ahorro seria insignificante. Ni
siquiera esta medida puede considerarse disuasorio ya que estos enfermos
necesitan obligatoriamente estos medicamentos ya que puede irles la vida en
ello. Debería de anularse esta medida que va entrar en vigor a primeros de
octubre, sigue habiendo multitud de gastos en entes públicos y subvenciones donde
recortar.
Conchita Monsó
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo
Jose Villar Campuzano
ResponderEliminarSinverguenzas inhumanos, pero en asesores y metidos
Kata Cris
ResponderEliminarcrear malestar social es muy fácil y mas con personas que no tienen salud, basta de manipular, esto no es cierto