El examen de acceso a funcionarios de la enseñanza
El informe sobre las últimas pruebas de acceso de la
Comunidad de Madrid a sus distintos cuerpos del profesorado y sus resultados causa
escalofríos por el bajísimo nivel general de los aspirantes. Hay que
preguntarse en manos de quienes están nuestros hijos para su educación. Porque
muchos de los examinados están ya ejerciendo como interinos tanto en la
educación pública como en la privada. Es resultado es pavoroso.
Sólo el 13% de los maestros en ciernes superó los exámenes
de acceso, elaborados con preguntas del nivel requerido para alumnos de 12
años, lo que significa que el 87% de los que aspiran a convertirse en
profesores saben todavía menos que los niños a los que supuestamente quieren
enseñar. El 90% de los que el sistema universitario ha calificado como aptos
para la enseñanza fue incapaz de realizar cálculos elementales con sistemas de
medida tales como kilos y gramos, pero es que en el resto de materias, como
Lengua o Ciencias Sociales (ahora Conocimiento del Medio), el desenlace no ha
sido mucho mejor.
Más allá de disparates concretos que revelan una incultura
insondable –y seguramente irreversible– del opositor en cuestión, como afirmar
que la gallina es un mamífero o que Soria es una comunidad autónoma cercana a
La Coruña, lo que resulta especialmente alarmante es el nivel medio demostrado
por los futuros profesionales de nuestra educación pública.
El desastre pavoroso que reflejan los resultados deja bien a
las claras el estado vergonzoso de la universidad española, al menos en la rama
de Ciencias de la Educación. La Consejera de Educación de Madrid, Lucía Figar,
tiene por tanto toda la razón al exigir al Ministerio una reforma en
profundidad de los planes de estudio de Magisterio, así como de los temarios
que estudian los aspirantes a maestro y profesor a la hora de opositar. Ahora
bien, mientras se pone remedio a este despropósito académico, es imprescindible
evitar que los que hacen gala de tan monstruosa ignorancia accedan a la función
pública en los distintos cuerpos del profesorado oficial.
Precisamente por eso resulta obligado aplaudir la decisión
de consejera de Educación de la Comunidad de Madrid, Lucía Figar, de modificar
los baremos para convertirse en funcionario de la enseñanza, incluido el acceso
a las bolsas de trabajo de las que surge el profesorado interino, donde hasta
ahora primaba por encima de todo la mera antigüedad. La intención de la
consejera Figar es que la nota del examen suponga el 80% de la puntuación total
(hasta ahora era del 36,1%), de forma que un titulado que no sepa que la
gallina es un animal ovíparo o que Soria es una provincia de Castilla-León
tenga vedado su acceso a las aulas, al menos en calidad de profesor.
Este que es solo un resultado parcial de una autonomía, se puede
extrapolar a todas las demás comunidades que han bajado la exigencia para el acceso a
la educación como un medio un medio y un refugio fácil de familiares y
allegados de políticos para su colocación, basandose mas en criterios políticos
que en la verdadera capacidad de quienes deberían ser los mejores. En comunidades de sesgo nacionalista puede llegarse a plantear resultados aún más
alarmantes dado que la tendencia de mirarse el ombligo desdeñando a lo que lo rodea es cosa mucho mas frecuente especialmente en asignaturas como literatura, historia y geografía,
donde se limitan a enseñar solo aquello que les interesa a los políticos nacionalistas.
Esteremos que esto sirva como un toque de atención para que todos
estos señores con camiseta verde que andan revolicando por la calle lleguen a
la única conclusión posible. Para poder llegar a enseñar, hay que haber
estudiado (y mucho) antes.
Mariram Rb Robles
ResponderEliminarEspeluznante comentario que deja clara su postura ideológica y, lo que es peor, tiene faltas de ortografía.
Jose Pedro Morillas Corona
ResponderEliminar¡¡JODER yó estoy alucinado con esta noticia, mí cultura basica, es del principio de los sesenta, en colegio nacional.... pero exastamente ese tipo de cosas, la aprendimos. !!Estos son de la LOSE, NO¡¡, pues viva los qué, tuvimos la enciclopedia Alvarez, en el cole¡¡...... y que dicen los sociatas de esto¡¡
Andres Rodriguez Perez
ResponderEliminar-Supongo que habra que aprobarlos, no sea que se traumatizen, a fin de cuentas que importa que Avila este en La Coruña, o que las gallinas sean mamiferos, o que el Mississipi pase por Madrid.El asunto es seguir idiotizando a las generaciones futuras, precisamente para que sigan manteniendo en la mamandurria a los ineptos que nos llevaron a esta situación.
Fernando Medinilla Perez
ResponderEliminarYo tengo 34 años, y cuando veo los libros y asignaturas de mi hermano menor de 15 años me parecen increibles, pues son el equivalente a mis libros de 5 de la EGB. De toda la página, 2 tercios son un dibujo enorme, y el resto un resumen, del cual otro tercio ya esta subrayado. Y lo que se supone le basta con aprenderse esta en un pequeño recuadro verde. Si le dierán las asignaturas de mi segundo de BUP, con su latín, filosofía, matemáticas de las buenas y todo el resto, le daba un síncope. Sinceramente la educación de antes era a mi parecer mucho más completa y de un nivel muy superior, y por ello te exigía unas horas de estudio y un esfuerzo que ahora son implensables en un chaval. Por regalar titulos no se hace inteligente a la gente.
Eloy Sagüillo Rodríguez
ResponderEliminarNo olvidemos que es la "Generación más Preparada"que ha tenido España en su larga Historia, ¿Qué tiene de extraño que el 100% haya sacado de puntuación "Summa coim Laudae"?
Andrés García
ResponderEliminarLos que llevamos en la profesión desde hace mucho tiempo ya lo sabemos. Hemos comentado en múltiples discusiones que una catedrático de instituto en los sesenta o principios de los setenta, tenía y tiene mas conocimientos que un catedrático actual. Ya en la última decada del pasado siglo palabras como "sátrapa" o "crápula" no se encontraban en el dicionario de muchos profesores, cuando a finales de los setenta "mohino" o "alevoso" se encontraban en los textos a leer por los alumnos de tercero o cuarto de EGB. En los claustros se discute sobre "El día de la mujer trabajadora" pero no se habla de cómo mejorar la lectura ni de hacer comprender a la familia la importancia del esfuerzo de los alumnos. Al final que papá Estado nos dé de comer, nos arriende un piso barato y nos lleve de vacaciones. Así nos va y me temo que esto no ira mucho mejor. ¿En qué estación nos podremos apear?
Paka Cortés
ResponderEliminarPARA EMPEZAR UN BUEN REPASO DE CULTURA GENERAL QUE LA MAYORIA D EPREGUNTAS QUE AHN FALLADO YO CON DOCE AÑOS LAS SABIA DE MEMORIA
Pedro Marquez Carballo
ResponderEliminarEsto se veia venir, debido a la falta de preparación a la que estan llegando los estudiantes actuales y pasados, por no enseñarlos a estudiar como se ha hecho toda la vida, a base de hincar los codos.
Juana Garcia Martinez
ResponderEliminarcuando lo lei no terminaba de creerlo
Marimar Calvo Begue
ResponderEliminarBueno...y si se lo ponen a diputados , concejales ..incluso a algún presidente ...??? y me parece de vergüenza . La mía , es una generación sobradamente preparada...LOGSE.
Juana Garcia Martinez
ResponderEliminarposiblemente estarian peor
Enrique Porfirio Pascual Surra
ResponderEliminarPero es que no se dan cuenta que den la respuesta que den no van a probar las oposiciones, pues se examinaron 14.000 para cuantas plazas. La mayoría de las contestaciones de chorra, fueron intencionadas. Puede ser que a algunos profesores les falte algo de historia o geografía , pero no para llegar a esos extremos.
Si ha ocurrido como Vd. dice... ¿Que sentido puede tener presentarse a unas oposiciones donde ya se dan por perdidas y como medio ¿de protesta? se dan estas respuestas escalofriantes. ¿Estamos todos locos?
EliminarEnrique Porfirio Pascual Surra
EliminarY en particular paso de los de las "camisetas verdes", pero os comento lo que ocurre en la Comunidad Valenciana. Hace varios años que no se presentan oposiciones y las de esta año están formadas de la siguiente forma. 70 Plazas para ingles, 50 de educación infantil, 80 de educación especial y 60 de formación profesional. El resto no lo sé donde irán a parar, en total 300. Con qué humor se puede presentar unos profesores que llevan muchos años dando clase y se encuentran con que si quieren una plaza tienen que bailar con la mas guapa. Es vergonzoso, no los culpo a ellos, culpo la la Generalitat de Educació. Y que conste que a mi no me toca nada pues estoy casi jubilado, bueno es un decir, y no tengo que ver en nada en educación, pero persona llegadas a mí, SI
Marimar Calvo Begue
ResponderEliminarHayque reformar muchas cosas . Por supuesto que el sistema educativo también ... Joer , hemos perdido el Norte , en cuanto a valores ...
Marimar Calvo Begue
ResponderEliminarA ver si los de las " camisetas verdes " se enteran y en lugar de hacer que sus alumnos las lleven también ..Se pongan a dar clases como debe ser.