La educación como arma de segregación

Uno de los mayores problemas de la descentralización de este país que han ayudado a profundizar en la crisis que tenemos es la educación. El gobierno de España, en un gesto de buena voluntad, cedió las competencias de educación a sus provincias. Entre otras cosas había que evitar el empobrecimiento de las lenguas locales. Lo piden algunas regiones. Bien. Loable empeño.

Pero, ¿qué hacen esas provincias? Montan un sistema que discrimina el español, que ignoran todo aquello que no ocurra dentro de sus “fronteras”, se inventan la historia de su territorio con unos héroes ficticios que más les convenga y convierten el sistema escolar de la provincia en una máquina de separar dedicada a fabricar patriotas de la provincia (a la que ellos llaman nación) de tal manera que han creado unas fronteras ideológicas con los ciudadanos del resto del país. Lavan el cerebro a los niños y los predisponen contra el resto de sus conciudadanos. Usan la educación para fomentar la segregación y la discordia en España. Esto debería ser delito, pero en España es de lo más normal. Han tenido tanto éxito que en esos territorios es de mal gusto, por decir lo menos, declararse español.

Tan lejos han llegado las cosas, que destacados intelectuales y profesionales de esas provincias se ven obligados a emigrar dentro de su propio país para preservar a sus hijos del lavado de cerebro provincial. ¿Y qué hace el gobierno de España? Pues el gobierno de España apoya a los segregacionistas, gobierna con ellos, niega la evidencia y otorga cada vez más poder y más competencias a las provincias que usan las competencias otorgadas por el gobierno de Rodríguez Zapatero para dividir y sembrar la discordia entre los ciudadanos españoles.

Hoy día de la Constitución hay que recordar a estos gobernantes que actúan de esta manera que han accedido al poder gracias al documento que acordamos todos los españoles donde se reflejan los derechos y obligaciones de cada uno y juraron guardarla para obtener el poder. El hecho de que algunos de ellos coja de la Constitución aquello que le interese y se niegue a cumplirla en aquello que no le interesa, demuestra la baja categoría de algunos de estos gobernantes que después con palabras grandilocuentes pretende decir lo que tienen que hacer los demás sin cumplir con sus obligaciones aunque sea de manera presencial.

El hecho es que hoy estos gobernantes de provincias que han acudido a celebrar el día de la Constitución por muchos votos que hayan obtenido y negarse a compartir esta Constitución junto a los demás españoles, demuestra su baja estofa y nos dice que están dando un mal ejemplo en la educación de nuestros hijos que les están dejando tal mensaje de irresponsabilidad que no habría que dejarlos de ninguna manera en manos de desalmados que lo único que buscan son adeptos a su causa.

Y no estoy señalando a nadie…