NI GENERAL, NI PERMANENTE, NI VERIFICABLE

NI GENERAL, NI PERMANENTE, NI VERIFICABLE

Que este gobierno está dispuesto a dejar que ETA campe de nuevo a sus anchas coaccionando o asesinando ciudadanos vascos con nuestro dinero de los ayuntamientos del Pais Vasco, es una obviedad y ya no lo discute nadie. Zapatero, Patxi López y por extensión Rubalcaba, son ya ahora los únicos españoles que a estas alturas aún esté hablando de una “tregua” que solo está en sus deseos.

ETA anunció en enero un alto el fuego que calificó de “general, permanente y verificable”. Sin embargo, parece que no es tan ‘general’ como prometió. Al menos por los datos que manejan los servicios policiales.Ahora mismo no hay atentados ni violencia en España, pero en cambio ETA-Batasuna se está preparando y reforzando para un nuevo periodo de atentados, gracias a las facilidades dadas por el inefable Ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba.

El ‘aparato militar’ de ETA no está en tregua. Así lo constatan las informaciones de las que disponen los servicios de Información tanto de la Guardia Civil como de la Policía Nacional. Y los datos que reciben de los servicios de seguridad franceses indican que la banda terrorista se sigue moviendo. 

El ambiente entre los agentes que luchan contra ETA es, en este momento, de “incertidumbre” sobre si ha llegado o no el final del terrorismo. Por un lado, consideran “muy positivo” el desmarque tan rotundo de la violencia que ha hecho la izquierda ‘abertzale’. “Lo que está claro es que Batasuna ha dicho que se acabó la lucha armada”, Pero, por otro lado, al ministerio del Interior están llegando inquietantes informaciones que apuntan a que ETA no está cumpliendo el alto el fuego que hizo público en enero, y que, desde luego, no es “general”. 

Estos son los datos que evidencian que ETA se está moviendo:

Robo de coches en Francia. En las últimas semanas, las fuerzas de seguridad galas han constatado el robo de, al menos, dos vehículos: uno en el centro y otro en el sur del país. Se atribuyen, “casi con total seguridad” a ETA, apuntan fuentes de la lucha antiterrorista a las que ha tenido acceso ECD. 

Siguen cobrando el impuesto revolucionario. Un informe elaborado por la Policía Nacional, fechado el pasado 8 de febrero, indica que, durante la primera semana del mes, se interceptaron pagos. Han sido, al menos, dos: un empresario de una importante multinacional ha entregado 300.000 euros, y el propietario de un pequeño comercio hostelero ha pagado 15.000 euros. 

Desde noviembre, ETA no ha enviado ninguna carta exigiendo el llamado impuesto revolucionario. Fuentes policiales explican que la banda suele enviar estas misivas por remesas y que no hay total seguridad para afirmar que la banda ha detenido este sistema de extorsión. 

Hay que recordar que, tal y como se contó en estas páginas, el “impuesto revolucionario” es la principal fuente de financiación de los terroristas en la clandestinidad. De modo que, si no hay ingresos, la infraestructura etarra no podría mantenerse por mucho tiempo. Además, las ‘herriko tabernas’ de cinco localidades importantes continúan recaudando dinero entre sus clientes “para la causa”. Se trata de los establecimientos de Hernani, Zarauz, Mondragón, Lezo y Rentería.

Movimientos de etarras. Los servicios de Información tienen constancia de que ETA ha centrado sus actividades en el centro y norte de Francia. Se han detectado “salidas y entradas” en las últimas semanas en dos ciudades ‘calientes’: París y Burdeos. Se sospecha, de hecho, que la actual cúpula se encuentra oculta en la capital gala. 

La CNI informa que De Juana Chaos con orden de busca y captura internacional ha dejado su refugio en Irlanda y está en Venezuela en contacto con los demás etarras que están al amparo de de Hugo Chávez, El servicio secreto español dice tenerlo controlado, pero mientras tanto continúan con sus sesiones de entrenamiento en los campos las FARC. 

Tenemos al principal dirigente de ETA, Yosu Ternera al que los servicios secretos también controlan pero no detienen por el norte de Italia moviendo los hilos de una “negociación” que tiene visos de un nuevo capítulo de la política de las negociaciones fallidas de José Luis Rodríguez Zapatero.