Bolsillos de cristal

Bolsillos de cristal

José Bono, en una entrevista concedida hace pocos días a Punto Radio dijo que él es "partidario" de que diputados y senadores se pronuncien al respecto porque quiere evitar que haya "zonas de penumbra". "No se puede defender nuestra actividad si no somos totalmente transparentes. Hay que tener los bolsillos de cristal e invitar a los ciudadanos a que los miren", ha sentenciado. Él presume de haber sido "el primer político de España y de Europa que público sus bienes y sus rentas" en el Boletín Oficial de Castilla-La Mancha, comunidad de la que fue presidente.

Ahora aparece en la prensa la noticia que dice “Un juez de Toledo investigará las cuentas de la hípica Almenara” de la que José Bono es socio mayoritario. En realidad esta querella en la que aparecen imputados los 4 administradores de la Hípica que no son más que el chofer o el cuidador de la cuadra de la hípica que él es el socio mayoritario con más del 80% de las acciones.

Al señor Bono le tocará ahora explicar, los enormes beneficios que le están produciendo sus negocios, que según el juez de Toledo que instruye el caso pueden ser constitutivos de delito así como que pueda existir un perjuicio para "el interés general", pues el socio mayoritario de Hípica Almenara  es "una sola persona física". Es decir, José Bono.

El juez asegura que este caso, aparte del perjuicio que el presunto falseamiento de las cuentas haya podido causar a los socios, "atañe a la transparencia que debe imperar en toda sociedad democrática en tanto en cuanto el socio mayoritario de Hípica Almenara es actualmente un alto dignatario de Estado". Esta circunstancia no es "baladí", añade el auto, pues se trata de "la actividad privada de un gestor público".

Pues bien, Bono que luce un patrimonio de 6 millones de euros en toda clase de bienes como viviendas, locales y negocios de su propiedad y de muy difícil justificación, comparados con sus ingresos como Presidente de Castilla la Mancha y ahora Presidente del Congreso, tiene el personal mosqueado por el enorme crecimiento en pocos años de su patrimonio, pero que hasta hace poco ha logrado eludir cualquier denuncia o investigación judicial, eso sí, siempre con la ayuda de la fiscalía del Gobierno.

Dentro de pocos días la ciudadanía podrá observar los bolsillos de cristal que dice tener el Sr. Bono, o tener que hacer la cuenta de los cristales que hay dentro.