¿Reformar la Constitución?

Se ha llegado este año al dia de la cada vez más triste celebración de la Constitución del 78 con importantes ausencias en el acto central, donde se observan cada vez más amplias grietas y discrepancias de cada uno de los partidos en su articulado, de tal manera que a pesar de sus discrepancias los grupos políticos coinciden en la urgencia de su reforma. Eso si por muy distintos motivos.

La Constitución es la norma básica de convivencia en nuestro país, con la cual se mueven las demás leyes del Estado y los partidos políticos y cada dia mas políticos ye instituciones del país no están haciendo más que soslayarla o saltársela directamente como está ocurriendo en Cataluña y País Vasco. Pero… ¿Hace falta reformarla?

Aparte del sistema sucesorio de la monarquía que hace falta una reforma sustancial, Rubalcaba afirma que si y que hay que transformar nuestro país en un estado federal, pero ni él ni sus distintos dirigentes tiene muy claro como debería de ser. Rajoy dice por otra parte que tal como están las cosas en este momento no es oportuno realizar cambio alguno, si no hay un ampluo consenso entre todas las formaciones políticas, algo que coincide con la Presidenta de Andalucía, Susana Díaz. Estan los partidos nacionalistas que aspiran a tener mucha mayor autonomía ante el Gobierno Central… etc. etc… Haría falta un nuevo reordenamiento territorial de todo el estado.

Partiendo de la base que la Constitución es la Ley de Leyes por excelencia, el primer obstáculo que encontramos es que en España muchas de las leyes en vigor no se cumplen y en muchos casos la administración ha renunciado a exigir su cumplimiento, tanto sentencias judiciales como normas que emanan de la propia Constitución, especialmente aquellas que afectan a resoluciones que afectan a Comunidades Autónomas y su funcionamiento. También aquellas que afectan a los principales partidos políticos, sindicatos o grupos de presión lo que hace a nuestro ordenamiento jurídico que parece impecable en teoría en algo que ha perdido su funciones.

Solo se podrá reformar la Constitución, si previamente existe un amplio acuerdo entre los principales actores políticos sobre cuales deben de ser los artículos a modificar y solo si hay un amplio acuerdo para su cumplimiento, previendo en la mismo texto, la posibilidad de nuevas reformas sin modificar el texto y especificar las sanciones a aplicar a los firmantes, sin ninguna excepción.

 

Mientras esto ocurre, quizá muchos de los problemas ahora existentes se podrían simplemente solucionar con el estricto cumplimiento de la Constitución actualmente en vigor.