Carme Forcadell y ANC

Cuando Artur Mas salió elegido en por segunda vez en el año 2011 presidente de la Generalitat de Cataluña anunció la creación de un organismo que iba a capitalizar las ansias independentistas catalanas la llamó Asamblea Nacional Catalana (ANC) que se ha encargado de la coordinación de cualquiera de los actos de reivindicación que se han estado realizando desde cualquier población del territorio catalán.

Ahora a ANC pone la música, y CDC y ERC bailan al compás. Los mismos que encumbraron a la entidad de la nada, ahora se ven secuestrados por ella. Esta es la fotografía de la política catalana y del proyecto independentista promovido por Mas y Junqueras, también denominado "proceso", según las fuentes. Así, ante cada toque de silbato de la presidenta de la ANC, Carme Forcadell, los dirigentes de ambas formaciones acuden raudos y veloces a dar las correspondientes explicaciones.

El engranado y voluminoso agit-prop separatista, que llevó la Vía Catalana por la independencia hasta las páginas del Wall Street Journal o el Financial Times incluso días antes del 11-S, no se entiende sin una figura, Carmen Forcadell, presidenta de la Asamblea Nacional Catalana (ANC), plataforma organizadora de la hilera secesionista.

Carme Forcadell  (Barcelona 1.956) es una política catalana, presidente desde el 2011 de la Assamblea Nacional Catalana, organización y movimiento civil en favor de la independencia de Cataluña. Es socia de Ómnium Cultural y fue militante de Esquerra Republicana de Catalunya.

Este sábado, la ANC dio un ultimátum a nacionalistas e independentistas. Han de convocar un referéndum antes de junio en el que se pregunte con toda claridad sobre la independencia de Cataluña y que se responda con un sí o un no; han de presentar una candidatura unitaria a las europeas; y han de formar un gobierno de "concentración nacional" cuando se les impida celebrar la consulta. De lo contrario, habrá movilizaciones. Carme Forcadell, ha revelado que su entidad tiene un 'plan b' por si no hay definida la fecha y la pregunta de la consulta soberanista antes de fin de año, pero confía en no tener que recurrir a él.

"Cualquier declaración que podamos hacer hasta finales de año no ayudaría al proceso", ha explicado en una rueda de prensa, en la que, a pesar de todo, ha avalado que la ANC fije su posición y marque un horizonte. En todo caso, no ha querido entrar a valorar el texto de la pregunta propuesta por la entidad.

¿Ingenua? Creer que porque se unan en cadena 400 o 500 mil, o un millón, de los 7.5 millones de catalanes, vestidos de amarillo, con banderas al cuello, y gritando IN-DE-PEN-DEN-CIA, moverá a las potencias del Mundo, demuestra una ingenuidad de fanático. Ingenuidad que seguro no comparten quienes la han lanzado a la fama, CIU y ERC, que financian a cargo del déficit el despliegue, y además de lo gastado hasta el momento preparan para 2014 una partida presupuestaria de 25 millones:

Conocedora de las estratagemas mediáticas para lograr la repercusión deseada, esta militante de ERC ha sido la cara visible y principal impulsora (en la sombra, lo ha sido el Gobierno de Artur Mas) de la cadena humana articulada en torno a una campaña que buscaba amplia resonancia y remover conciencias. Maneja toda una red tejida en torno a su figura, emergente entre los suyos, pues despierta enorme empatía en ellos. Una vestal del secesionismo que se eleva sobre el jefe de la Generalitat. Es ella a la que veneran como su verdadera lideresa, su alma máter, más que Oriol Junqueras, presidente de ERC, o el propio Artur Mas, al que sólo ven enfrascado en un juego de equilibrios entre el nacionalismo y el sepatarismo. Si los independentistas vascos confían su futuro a Arnaldo Otegi, sus homólogos catalanes lo ponen en manos de Carme Forcadell.

La considerada –así la conciben los suyos– musa de la independencia comenzó sus andadas en el cuarto poder, paradójicamente, trabajando al servicio de la televisión pública española en los albores de la Democracia, a la vez que colaboraba con otros medios de comunicación catalanes. En concreto, esta licenciada en Filología y Ciencias de la Comunicación por la Universidad Autónoma de Barcelona, formó parte del programa Giravolt (Voltereta) en TVE entre 1979 y 1982. Una especie de Informe Semanal a la catalana que ya por el año 1976, todavía con el franquismo, hacía reportajes con el testimonio de representantes de las centrales sindicales y partidos aún no legalizados, asociaciones de vecinos, colectivos sociales y otros personajes políticos que habían estado vetados por sus creencias ideológicas.