CATN – “El Consejo Ibérico”, “El sitio de Barcelona” y demás ocurrencias

En una conferencia de prensa en el Palau de la Generalitat, Carles Viver Pi-Sunyer Presidente del Consell Asesor per la Transiciò Nacional (CATN) de Catalunya ha presentado cuatro informes donde se adelanta la manera cómo se articularía la Administración Tributaria, la cooperación Catalunya y España, la internacionalización de la consulta y las Tecnologías de la Información y la Comunicación.

En este informe de 38 páginas se recomienda "reforzar institucionalmente la estrategia de internacionalización". Además de preconizar que un grupo de expertos "contribuya a la creación del futuro servicio de asuntos exteriores", el consejo se centra en analizar cómo debe defenderse la celebración de la consulta en el ámbito internacional frente al argumento del Gobierno de que es "ilegal" o "anticonstitucional". El Consell recomienda utilizar como base la defensa del "principio democrático" y el derecho de autodeterminación reconocidos por la comunidad internacional a todos los "pueblos" o "comunidades nacionales".

El Consejo Asesor para la Transición Nacional (CATN) de Cataluña ha propuesto la creación de un Consejo Catalano-Español, inspirado en el modelo del Benelux, para mantener e impulsar las relaciones entre un eventual Estado catalán y España. Todo ello después de mantener según sea la audiencia toda clase de modelos como los de Quebec, Escocia o Kosovo. Todo ello después de haber mantenido, según sea la audiencia, toda clase de modelos para cada uso como los de Quebec, Escocia o Kosovo.

El informe sobre las 'Relaciones de cooperación entre Catalunya y el Estado español' defiende que el FC Barcelona y el RCD Espanyol podrían seguir en la Liga española de fútbol con una Catalunya independiente, caso que hacen extensible al resto de equipos catalanes que participan en competiciones españolas. Así, defiende la posibilidad de que los clubes catalanes continúen en los torneos españoles.

En este informe se recomienda "reforzar institucionalmente la estrategia de internacionalización". Además de preconizar que un grupo de expertos "contribuya a la creación del futuro servicio de asuntos exteriores", el consejo se centra en analizar cómo debe defenderse la celebración de la consulta en el ámbito internacional frente al argumento del Gobierno de que es "ilegal" o "anticonstitucional". El Consell recomienda utilizar como base la defensa del "principio democrático" y el derecho de autodeterminación reconocidos por la comunidad internacional a todos los "pueblos" o "comunidades nacionales".

Considera, en este sentido, que se debe poner especial énfasis en que "después de haber intentado sistemáticamente y sin éxito conciliar su pertenencia nacional propia con la pertenencia al Estado español, Catalunya ejerce el derecho de autodeterminación como último recurso para conseguir su pleno reconocimiento nacional" y también para acabar con una situación "de discriminación fiscal sistemática" y de "desprotección lingüística y cultural".

Mientras esto ocurría, la consejería de Interior de la Generalidad de Cataluña ha elegido como imagen de su felicitación navideña un plano de las fortificaciones de Barcelona de principios de siglo XVIII. El departamento, del que está al frente el dirigente de Unió Democràtica Ramón Espadaler, ha enviado una tarjeta con una ilustración del frente marítimo de la capital catalana realizada por los ingleses para preparar el bombardeo y desembarco de 1705, el episodio de la Guerra de Sucesión mediante el cual los austracistas se hicieron con el control de la ciudad tras un asedio que, según las crónicas, poco tuvo que envidiar al sitio de 1714.

Los fastos del tercer centenario de la caída de Barcelona a manos de la tropas borbónicas han imbuido a la administración catalana de un ardor guerrero que se ha trasladado a las felicitaciones navideñas. Sin embargo, la postal no refleja, como pretende, la apacible Barcelona previa a la destrucción de 1714 por las tropas borbónicas, sino la capital que fue asediada, bombardeada y ocupada por las tropas aliadas para facilitar la entrada del archiduque Carlos III con el apoyo de “Els vigatans” (grupo formado por grandes propietarios rurales de Vic y comarcas vecinas), que nueve años después abandonaría la ciudad de Barcelona a su suerte. Artur Mas habría pretendido recordar con esa estampa (un plano de las fortificaciones de Barcelona utilizado por los austracistas para ejecutar un bombardeo sobre la ciudad que no tiene nada que envidiar al de nueve años después) el "pacto de Génova", el acuerdo entre los “Els vigatans”, e Inglaterra para decantar Cataluña del lado del Archiduque Carlos, pretendiente de la Casa de Austria, en contra del Borbón Felipe de Anjou.

Este capítulo de la Guerra de Sucesión no forma parte de los actos y exposiciones de la Generalidad, pero se ha colado involuntariamente merced al entusiasmo, no exento de torpeza, con el que CiU celebra y recuerda a la mínima ocasión la Guerra de Sucesión, que ha convertido en un enfrentamiento entre un inexistente estado catalán y España. De ahí que hasta las felicitaciones navideñas parezcan más postales propagandísticas para un conflicto que expresión de buenos deseos y prosperidad.

Recomiendo echen un vistazo a La Vanguardia de fecha de ayer donde se reflejan una parte de estas noticias y se lean detenidamente los comentarios donde podrán observar la mezcla de desencanto, cabreo y cachondeo de sus lectores, al enterarse hacia que derroteros se dirigen el “Derecho a decidir” en boca de los habituales “hooligans” de Artur Mas y su proyecto. Yo prefiero no hacer más comentarios.

 

http://www.lavanguardia.com/politica/20131220/54398432650/consell-assessor-propone-consejo-catalano-espanol-independencia.html