Estado de malestar e impaciencia
La información que publicaba de Libre Mercado es de las que provocan
pasmo: “España descansa sobre los hombros del 30% de la población”. En efecto,
son 13,8 millones los que, con su trabajo y sus impuestos, sostienen el país,
que cuenta con 47 millones de habitantes, de los que 17,6 millones son parados,
pensionistas o empleados públicos y… asesores o enchufados varios.
El Mundo publicaba también en
su edición dominical que actualmente existen entre 18.000 y 20.000 “asesores” solo
a afectos a los cargos públicos electos, cobrando sueldos entre 50.000 y 80.000
euros anuales que no han demostrado mérito ni realizado oposición alguna. En
todas las administraciones y en todas las regiones. El Defensor de Pueblo del
Pais Vasco, él solito cuenta con 60 de estos especímenes. O la Alcaldesa de
Madrid que lo supera con 254 asesores de todas las condiciones.
La crisis económica ha puesto
al descubierto el
demencial e injusto esquema de nuestro Estado del Bienestar,
ineficiente, mediocre, generador de incentivos perversos y lesivo para los
intereses nacionales, habida cuenta del duro castigo a que somete a los
sectores más productivos y dinámicos de la sociedad.
Mientras el contador de los parados ha superado los 6.200.000 millones de españoles camino a los siete millones, con dos millones sin prestación con miles de familias que tienen todos sus miembros en paro, este domingo Mariano Rajoy ha pedido paciencia a los españoles, asegurando que al final de su legislatura se vería el resultado de su trabajo.
Estamos en un estado de cosas insostenible pero sobre todo un pais injusto e
ineficaz, que ahonda la durísima crisis que padecemos desde
hace ya un lustro y que amenaza seriamente nuestro futuro, a corto, medio y
largo plazo.
Urge tomar medidas
contundentes para podar
las Administraciones Públicas, al objeto de hacerlas más
funcionales e impedir que sigan siendo cueva de enchufados de todo pelaje y
condición, ya que todo este personal pase directamente al paro y engrosen su
abultada nómina, el Estado ahorraría además un montón de dinero en concepto de alquileres,
teléfonos, electricidad o papel higiénico.
¿O es que acaso piensan contratar a todos los parados de este país como asesores? Así se resolvería de un plumazo el problema del paro.
Asimismo, se impone una revisión en profundidad de las
denominadas prestaciones
sociales, especialmente de las destinadas a los desempleados,
que no deben ver en ellas un recurso de acceso universal y duradero. También
resulta de extrema importancia encarar de una vez, en toda su amplitud y complejidad,
la cuestión demográfica y por el momento dejar de financiar el aborto via impuestos, ya que
cada vez menos trabajadores productivos tienen que mantener a mas personal de
la casta extractiva. De no hacerlo, la situación puede ser tremenda en quince o
veinte años.
Por último, los poderes públicos han de atender como se merece a esos 13,8 millones
de españoles que están levantando el país a pesar de todos los pesares. Para
empezar, en vez de asfixiarlos y apabullarlos, deben tratar de ayudarlos.
Quitándoles de encima impuestos, regulaciones y prohibiciones que no hacen sino
perjudicarlos. Perjudicarnos a todos.
¿Se puede contar con el
Gobierno para esta empresa, sin lugar a dudas la más importante de las que se
nos presentan? Lamentablemente, no. El Gobierno, lo vino a demostrar el viernes
en el último Consejo de Ministros, está instalado
en la cobardía, la abulia o el ilusionismo del nefasto José Luis
Rodríguez Zapatero. Las tres opciones son pésimas. Y el tiempo pasa y Mariano Rajoy
habla solo de una posible solución para dentro de dos años cuando muchos desesperados
ya habrán tomado la decisión de quitarse de en medio. Tenemos recursos para que
esto no pueda llegar a ocurrir. Pero habrá que darse prisa.
wakamole
ResponderEliminarDecepción para el que esperase algo. Mariano demostró desde el minuto 1 con su subida de impuestos cual iba a ser su camino...
Sin proyecto, sin ideas y en manos de Montoro... a la deriva!
José Ángel
ResponderEliminarClaro que saben lo que hacen o al menos lo que quieren hacer: Aguantar como se pueda a costa de quien sea y como sea para no quitarle la mamandurria a ninguno de los miles y miles de enchufados.
No les importa el mal de la gente ni el riesgo, ni nada de nada, con tal de no quitar ni una de sus prebendas; les va muy bien como esta y no lo van a cambiar por las buenas.
Tomás Rosa H
ResponderEliminarYa lo creo que saben lo que hacen, mantener todos sus privilegios mientras estrangulan sin piedad a los demás.
Una mentira tras otra sin el más mínimo pudor, una situación insoportable de presión fiscal y recortes a los mismos de siempre sin tocar el monstruo estatal, autonómico y municipal. Tenéis merecido vuestra desaparición como partido en los próximos lustros.
Jaume Puig
ResponderEliminarLa sinceritat de les paraules d'en Rajoy s'han de valorar just en allò que valen, és a dir: en res. Com confiar en un senyor que ha rebut diner negre de Bárcenas i ho nega? I com confiar en un senyor quin partit s'ha finançat amb diner negre de Gürtel i també ho nega? Em venen bascas.
Joaquín Oncalada Moro
ResponderEliminarY encima tiene los santos cojones de decir que estamos mejor que antes. En que se basa, en el casi millon de parados más, en la bajada del pib del 1.5, en el éxodo de multitud de españoles pertenecientes a la generación más preparada de la historia de este pais..? Creía que lo de Zapatero no tendría parangón pero este fulano lo va a superar concreces...
Joaquín Oncalada Moro
ResponderEliminarRogaría a los futuros votantes del PP y del PSOE que se lo pensaran al menos tres veces antes de putearnos a todos los españoles. Gracias...
Sixto M. Hernández García
ResponderEliminarYo estaba convencido de que peor de lo que lo había hecho Zapatero, no se podía hacer. Ahora Rajoy está haciendo bueno a Zapatero. El sector privado se ha sacrificado y ha cumplido. El sector público ha hecho lo contrario: ha gastado mas, ha imcrementado el personal de las empresas públicas que tenían que cerrar. Siguen viviendo a lo grande, mientras el pueblo se muere de hambre. Y en verano se irán de vacaciones con el dinero de de nuestros impuestos, mientras media España no tiene que comer. Asco de políticos españoles.
Paco Escribano
ResponderEliminarMenudo elemento. Él y todos los que "saben lo que se hacen" En qué manos estamos... ¿Hasta cuando?