El "efecto" Alfredo

Mañana sábado será la proclamación de Alfredo Pérez Rubalcaba como candidato a la Presidencia de España en una reunión de trámite a puerta cerrada del comité federal, en el Palacio Municipal de Congresos de Madrid, y con la única intervención programada del secretario de Organización, Marcelino Iglesias. Tras ello llegará el discurso del ya candidato. La duda es si el nominado va a ser Alfredo o seguirá siendo el Rubalcaba….o quedará en una simple “P.“

La cuestión que ocupa a los pitonisos es si una vez presentada la dimisión de todos sus cargos tal simbiosis está destinada a perdurar o si, por el contrario, se procederá a la inmediata separación de los siameses. Los partidos son muy suyos y el se jacta de manejar los tiempos, lo cual sólo indica hasta qué punto el tiempo los maneja a ellos.  

Puestos en ese filo, no hace falta la bola de cristal para concluir que cuanto antes se distancie el nuevo Alfredo del viejo Rubalcaba, más se alejará de Zapatero, quien ha pasado de gran seductor a gran contaminante. Dicho de otro modo, el desempeño de Alfredo en las generales exige que mate al padre, aunque resulta que es el hijo y está muerto. Piensa rodearse de asesores a cual más senil y requemado para los nuevos tiempos que nos quiere ofrecer. A partir de ahora podrían ser Alfredo junto con Felipe, Maravall, Almunia y Solana quienes vayan a planificar nuestro futuro….Mal veo a nuestro país. El relevo generacional en el PSOE se da a la inversa y como inversión del relato freudiano. En consecuencia, se perfila una gerontocracia tras el feliz y glorioso reinado de los/las jóvenes/as mindundis. De cuál ha de ser la “viagra ideológica que preparen los veteranos para la próxima salida al mercado electoral, esperamos tener noticia.

Alfredo se ha estrenado como crítico y adversario de la banca y los banqueros, en clara señal de oposición al Gobierno de Zapatero y Rubalcaba. El candidato se ha significado como un futuro perseguidor de los tiburones  cuando ahora mismo puede darles caza. Ahí tiene, por no ir más lejos, a directivos socialistas de cajas de ahorro en lastimoso estado. Si cree que su gestión fue irresponsable y sus sueldos, desmesurados, por qué no aplicar retroactividad y confiscárselos.

Mientras el presidente Zapatero alienta las expectativas sobre las palabras de su sucesor y le da "un gran valor" a tenor de que será el primer discurso de Rubalcaba como cabeza de cartel: "Desde luego, todo el PSOE está con una alta expectación para escuchar el proyecto de país de Alfredo", concluyó, augurando "un gran discurso". "Habrá un antes y un después", ¿Alguien se lo cree? Creo que hay algo de recochineo en sus palabras.

En Ferraz los socialistas se esfuerzan en vender el acto. Apuntan a un discurso "potente", en el que quedarán fijadas sus líneas del programa. Nadie nos aclara si el candidato Alfredo nos dará finalmente su “receta” sobre la creación de empleo.