Primer aniversario del Gobierno de Pedro Sánchez

 

Pedro Sánchez logró ganar las elecciones del 10 de noviembre pero con menos escaños, tres menos, de los que el PSOE había conseguido meses antes, en las elecciones del 28 de abril. Entonces, en abril, Sánchez no quiso pactar con Iglesias ya que dijo no podría dormir por las noches, 

Sin embargo, 48 horas después de los comicios de noviembre, el entonces candidato socialista y presidente del gobierno en funciones, Pedro Sánchez, y el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, firmaron un preacuerdo para formar un gobierno de coalición para toda la legislatura. Posteriormente se agregaron nacionalista y la morralla anticonstitucional que manda en el Congreso de los Diputados .

Con tres escándalos por semana desde el principio de la legislatura, el Gobierno ha conseguido que nos acostumbremos a un vertiginoso ritmo de decisiones infumables, que cualquier barbaridad nos parezca normal. Con miles de muertos y millones de parados, ¿quién narices va a protestar por la erosión paulatina del Estado de Derecho?.

Y menos aún si el Gobierno cuida todos los detalles para tener anestesiados a amplios espectros de la sociedad: subida de salarios para los funcionarios y los pensionistas, ingreso mínimo vital para los más humildes, nuevo subsidio para los que dejen de cobrar el paro, renovación de los ERTE 'sine die'... Y que no falten tampoco ayudas para tener contentas a las televisiones. 

De hecho, este presidente del Gobierno está yendo mucho más lejos que cualquiera de sus predecesores. Hasta ahora aceptábamos como algo consustancial con el poder la toma partidista de RTVE o la Fiscalía, pero ahora se están dando saltos al vacío tan inquietantes como que el Congreso de los Diputados renuncie voluntariamente a su labor de control al Gobierno durante seis meses.

La oposición, dividida y enfrentada ha sido incapaz de enfrentarse durante este año a este dislate. Solo el Covid 19 con los errores y mentiras de Illa y Simón ha sido capaz de poner a esta banda de impresentables ante el espejo de la opinión pública.