Fin de trayecto

Como todos ya suponíamos, el Pleno del Tribunal Constitucional por unanimidad de sus doce magistrados ha declarado ilegal la declaración separatista del Gobierno de Artur Mas, abortando la posibilidad de que Cataluña pueda convocar un referéndum legal para la independencia y que la soberanía resida exclusivamente en el pueblo catalán por considerarla que no se ajusta a la Constitución.

Artur Mas debería percatarse que ha llegado al final de la “hoja de ruta” cuando dijo que no se iba a apartar de la legalidad después de haber ganado las elecciones en 2011 y haber dedicado su actividad política y gestora “exclusivamente” a este proyecto. Durante su gestión ha aumentado la deuda en más de treinta mil millones a la ruina que ya lo dejaron sus antecesores de Tripartito. Ha gastado cientos de millones para dotar a instituciones y medios catalanes con el fin de que todo fuera encaminado hacia su proyecto que el repetía constantemente tenía que ser legal y aceptado por el Gobierno central. Por si no lo sabía, ahora ya lo sabe  y cualquier paso que pueda dar hacia el manoseado referéndum tendrá quea ser en contra la ley.

Si Artur Mas escuchara, sabría que ha fracasado y no le queda otra que dimitir y convocar elecciones para que el pueblo catalán pueda decidir de nuevo si quiere seguir dentro de la ley o persistir en el empeño soberanista, dentro de una campaña donde debería explicarse claramente a los catalanes las consecuencias sociales y económicas de una declaración de independencia que ya no puede ser de otra manera que unilateral. Un nuevo proyecto que sería conducido por el mismo, Junqueras u otros que han estado hasta ahora apretando cómodamente en la sombra hacia la independencia por el camino de la ilegalidad.

Artur Mas que ahora viaja a Madrid para entierros y funerales no tiene ya ninguna confianza que el proyecto pueda triunfar, por ello no va a estar en la última tentativa legal posible de defender el proyecto ante el Congreso de los Diputados el próximo día 8 de abril y ha delegado a su escudero Francesc Homs junto al consejero de Agricultura, Josep Maria Pelegrí sean ellos quienes sean los que carguen con el fracaso.

Durante más de dos años ha tenido que escuchar desde distintosforos internacionales por activa y por pasiva la imposibilidad de poder seguir en la Europa Comunitaria a partir del momento de la secesión. Durante este tiempo ha estado viajando por todo el mundo intentando convencer a los mandatarios y los empresarios catalanes que salvo tímidas adhesiones no ha conseguido más que rechazo e indiferencia, Artur Mas ha llegado al final de trayecto ya que su proyecto ha fracasado.