Un homenaje a las víctimas del terrorismo sin las víctimas del terrorismo.

Ayer se celebró en el Congreso de los Diputados el homenaje anual a las víctimas del terrorismo, con la triste novedad de que apenas asistieron víctimas del terrorismo. Las principales asociaciones representativas de las víctimas, incluyendo la AVT, decidieron no acudir como manifestación de su protesta por la política penitenciaria del Gobierno con los presos etarras. Se manifestaron frente al Parlamento. Desde el momento en que el Gobierno optó por aceptar pactos con EH Bildu, públicamente y con fotos, optó también por cancelar una forma digna de entender la política

Un homenaje a las víctimas del terrorismo sin las víctimas del terrorismo. Así ha sido el acto que el Gobierno de Pedro Sánchez ha organizado en el Congreso de los Diputados, al que tampoco han acudido los principales partidos de la oposición, PP y Vox, como protesta por los pactos con los proetarras de Bildu, partido que sí que ha asistido. Los que disparaban a la nuca, los que aplaudían los disparos, los que se beneficiaban de los disparos y lo que traicionaron a los asesinados. Vaya puñado de hipócritas que ni sienten nada ni tienen el menor atisbo de arrepentimiento. La izquierda en pleno y la derecha racista vasca y catalana.

Es más, Bildu ha tenido un sitio preferente en este homenaje anual que el Congreso rinde a las víctimas del terrorismo. La coalición abertzale ha estado representada por primera vez por su portavoz parlamentaria, en este caso Mertxe Aizpurua, sentada en primera línea, en la bancada donde habitualmente se sientan los populares. Ver a Bildu -cuya portavoz se quiso retratar ayer en el Congreso- firmando pactos con los socialistas, ver a Otegui reconvertido en adalid de la estabilidad de Pedro Sánchez y ver las bienvenidas -‘ongi etorri’- a presos sanguinarios excarcelados son un golpe tras otro en el ánimo y la memoria de cada víctima del terrorismo.

Es un acto de hipocresía política lo celebrado en el Congreso. Está claro que el Ejecutivo de Pedro Sánchez tiene una sensibilidad especial para quienes están encarcelados por atentar contra la democracia, unos con prácticas sediciosas, y otros, con tiros en la nuca. En ambos casos, el resultado llama la atención por sus rasgos comunes. Arnaldo Otegui y Oriol Junqueras son los socios de referencia del PSOE y garantizan la estabilidad del Gobierno de Pedro Sánchez. La operación política cuadra al milímetro.