Si los dos no son capaces de dialogar, que se vayan cuanto antes

La reunión de Rajoy y Sánchez no ha durado poco mas de veinte minutos y ha terminado como el "Rosario de la Aurora", al parecer no tenían nada que decirse. La tensión se palpaba en el ambiente entre ambos equipos, que denunciaron "el circo" en torno a un encuentro que despertó una enorme expectación mediática en el Congreso. Y la crispación es el mejor síntoma del malestar que destilan el uno hacia el otro. Así como se observa en la foto, Rajoy le ha negado la mano, en el saludo preliminar. 

La negativa de Sánchez a hablar de una posible coalición les inhabilita a los dos para que en el caso probale que los socialistas no logren conformar gobierno junto a los de Podemos y los nacionalistas radicales, que excluyen tácitamente a los moderados de Ciudadanos como pretende Rajoy. Ambos están actuando como si fueran los dueños del país y del criterio de los militantes de sus partidos, con unos ciudadanos cada vez mas angustiados por la deriva y la corrupción instalada en ambos partidos y la grave situación económica. 

A pesar de lo mucho que les une, se han dedicado a hurgar en sus discrepancias. Se ha evidenciado la irresponsabilidad de ambos líderes y la falta de reacción por parte del PP para modificar sus propuestas ante la gran frivolidad por parte del PSOE

La división a que ambos no quieren llevar y que los españoles no debemos consentir. Se creen los dueños de los votos recibidos por sus partidos y los votos de los españoles han sido para nombrar a sus representantes que son los diputados, no para nombrar el candidato a presidente que es decisión de los diputados. Hay que decir que uno representa a más de siete millones de españoles y el otro unos cinco y nos llevan a un enfrentamiento entre españoles mientras tienen secuestrado nuestro futuro para los próximos años con su postura intransigente. 

Ante estas posturas solo caben dos salidas a la parálisis actual, toda vez que Rajoy nunca va a conseguir formar gobierno. La primera opción, es que Sánchez fracase y no logre conformar finalmente la mayoria de gobierno junto a Podemos y su largo trenecito de antisistemas o independentistas algo que Rajoy se agarra como clavo andiendo. La otra opción puede ser mucho peor, es que Sánchez finalmente lo consiga. En Madrid o Barcelona ya empiezan a comprobar sus resultados. Si los dos se sienten patriotas y no son capaces de dialogar y nos llevan a nuevas elecciones, es mejor que se retiren cuanto antes.