Salvador Illa hizo trampa: usó datos cinco días antiguos para poder confinar Madrid

Illa en la rueda de prensa en la que anunciaba el estado de alarma en Madrid. | EFE

Madrid y otros seis municipios más de la Comunidad están confinados porque Illa usó dtos de varios días anteriores para cumplir su propia norma.

El Ministerio de Sanidad ha reconocido que tomó de referencia los datos de incidencia acumulada de la pandemia en la Comunidad de Madrid del pasado día 4 para decretar este viernes el estado de alarma y confinar perimetralmente la capital y otros ocho municipios de la región: Alcobendas, Alcorcón, Fuenlabrada, Getafe, Leganés, Móstoles, Parla y Torrejón de Ardoz.

Según fuentes del ministerio han precisado a la agencia EFE, los datos eran del 4 y fueron "consolidados" el 8 de octubre, si bien esto en realidad no se sabe muy bien qué quiere decir y, aparentemente, sólo sería otra manipulación de Sanidad.

La elección de estos datos estaría de acuerdo con el plan que el Gobierno presentó en el pasado Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud el 30 de septiembre, un plan que el Ejecutivo considera aprobado de una forma flagrantemente ilegal, ya que las determinaciones de ese órgano sólo se pueden aprobar "por consenso", como dice claramente la Ley, y cinco comunidades votaron en contra, entre ellas Madrid.

Estas medidas que presentó el ejecutivo y que no fueron aprobadas por el Consejo Interterritorial incluían coordinar actuaciones cuando un municipio presente una incidencia acumulada de 500 casos o más por 100.000 habitantes en 14 días, que se podía medir "hasta 5 días antes de la fecha de valoración".

Así pues, el Gobierno estaría cumpliendo con una norma que según él ha sido adoptada en el Consejo Interterritorial pero que, como decimos, en realidad no se puede considerar aprobada.

Solo tres ciudades deberían haber sido confinadas

El consejero de Sanidad de Madrid, Enrique Ruiz Escudero ya había alertado este viernes que siete de los nueve municipios confinados tenían cifras de IA por debajo de los límites marcados por el propio Gobierno: "Siete de los nueve municipios están hoy por debajo de los 500 casos, y uno de ellos, la capital, por debajo de los 450", dijo en una entrevista en 13TV.

De hecho, según datos del día 7, dos antes de la publicación del decreto, en Alcobendas la IA ya no era de 643,37 sino de 450; en Alcorcón había pasado de 566 a 396; en Fuenlabrada no era de 792 sino de 608; en Getafe había caído desde los 732 a los 522; en Leganés de 619 a 441; en Madrid de 666 a 465; en Móstoles de 514 a 331; en Parla de 926 a 679; y, por último, en Torrejón de Ardoz de 651 a 448.

Así, de haber usado las cifras de las que Illa disponía -y que obviamente reflejaban la incidencia real de la epidemia en el momento de tomar la decisión- sólo se habrían confinado perimetralmente tres ciudades: Parla, Fuenlabrada y Getafe y las restricciones afectarían a medio millón de personas en lugar de cuatro millones y medio.

De hecho, según ha anunciado este sábado la presidenta Díaz Ayuso, en este momento ya sería toda la Comunidad de Madrid la que estaría con una IA por debajo de 500.

Illa, mentiroso compulsivo

Exactamente el 24 de abril el Ministerio de Sanidad había cometido la misma manipulación de los datos, aunque entonces fue en sentido contario, cuando quiso se intentó anunciar un descenso del crecimiento del 2,2% en el total de casos positivos confirmados, cuando junto a Fernando Simón los casos totales anunciaron que habrían crecido en 5.229 nuevos casos (asintomáticos incluidos), el mayor repunte de los últimos días y no en los menos de 3.000 nuevos casos anunciados, Así los 2.796 anunciados entonceshicieron pasar de los 214.535 a los 219.764.

En la propia rueda de prensa del viernes Salvador Illa describió la situación epidemiológica de la Comunidad de Madrid usando varios datos falsos: uno de ellos el de "fallecidos en la última semana" para lo que dio un número, 63, muy por debajo de la real en los datos del propio ministerio, en los que el número de muertos había aumentado en 187 personas; los otros fueron las cifras de ingresos en hospitales y enfermos en la UCI, engordadas en los datos de Sanidad desde hace semanas.

No es, no obstante, la peor mentira de un ministro que lleva desde el pasado mes de abril escudándose en una supuesta e irreal norma de la OMS para ocultar más de 20.000 fallecidos de las estadísticas oficiales.