Los empresarios catalanes que callaron durante el procés, ahora dicen basta

Patronales representativas del 90% de los empresarios soberanistas que quedan en Catalunya, han celebrado un gran acto en la antigua estación del Norte de Barcelona para expresar su malestar por los más de diez días de disturbios, decir que "ya basta" y reclamar al futuro Govern que se centre "en la recuperación económica". El clamor de los empresarios llega tarde, después de la fuga a otros lugares de España de mas 6.000 empresas y que las patronales se mantuvieran en silencio, durante los constantes altercados provocados por el proces. 

 

Una frontera, una posición numantina del empresariado catalán. Es la línea que ha trazado el presidente de Foment del Treball, Josep Sánchez Llibre, en un acto al que se han adherido más de 300 entidades económicas, sociales, culturales y deportivas, para que la política catalana se centre en la “recuperación económica” y deje de lado los postulados de la CUP. En todas las intervenciones de los distintos representantes empresariales se ha escuchado un doble mensaje: no a la violencia y un sí, con un apoyo cerrado, a los Mossos d’Esquadra. La policía autonómica no ha recibido en las últimas semanas un compromiso más claro con su trabajo que el que se ha mostrado en el acto empresarial. Es el “verdadero poder” de la social civil, según el propio Sánchez Llibre, que obligará al próximo Govern a tomar nota.

Resucitar el espíritu de Convergencia de los 80

En diferentes momentos del acto, apareció un espíritu del pasado reciente: la percepción de que se trataba de un acto de CiU, a finales de los años ochenta o principios de los noventa. Los protagonistas casi se repetían: Sánchez Llibre otrora lugarteniente de Jordi Pujol  ahora al frente de Foment y Jordi Casas, como su jefe de gabinete, encargado en los últimos días de coordinar a todas las entidades. Y con exconvergentes como Carles Campuzano, o ex políticos de Unió, como Manel Silva. Y con un tejido económico que era el que daba apoyo a CiU y que ahora se encuentra sin una línea clara que defienda los postulados empresariales.

Es destacable la gran contradicción del conde de Godó, que ha participado en este cónclave pero sin embargo sigue manteniendo la tendencia secesionista en RAC1, una de las emisoras de referencia del mundo independentista, y en la que trabajan y colaboran declarados secesionistas e insultadores profesionales, como Pilar Carracelas.

La mayoría de patronales, incluso Fomento y Pimec -ahora al frente de la iniciativa- mantuvieron actitudes ambiguas, sin advertir claramente de las consecuencias económicas que podría tener una declaración unilateral de independencia, salvo quizá el Círculo de Economía.

Durante el acto se ha leído un manifiesto de más 300 entidades del mundo económico y social de Cataluña para reclamar "de manera unitaria, urgente e inminente la condena de actos vandálicos sin precedentes y exigir responsabilidad política al Govern de la Generalitat y al Ayuntamiento de Barcelona". También se ha dado "apoyo total" a los Mossos.

"Los actos vandálicos de estos días y las imágenes que se han ofrecido al mundo comprometen el futuro de Barcelona y de Cataluña. No sólo afectan con graves e importantísimos daños a la propiedad pública y privada, sino que son el peor reclamo para las inversiones extranjeras y hacen mal en estos momentos en la economía de Cataluña, especialmente afectada por la crisis sanitaria y social derivada de la pandemia, provocando graves repercusiones en la recuperación del tejido comercial y empresarial", lamentan.