Puigdemont plantea quedarse en Bélgica y pedir la nacionalidad

Carles Puigdemont este martes en Bruselas / EUROPA PRESS

El expresidente catalán sopesa permanecer en Bélgica de forma definitva porque desconfía de su futuro judicial. Su intención sería fijar su residencia en Waterloo para "internacionalizar el procés".

Carles Puigdemont plantea quedarse en Bélgica y pedir la nacionalidad. Según asegura El Periódico, el expresident no tiene intención de regresar a Cataluña para evitar así las causas judiciales pendientes. 

El cree que aunque se rebaje el delito de sedición, también debería responder por un cargo de malversación que podría suponer una larga estancia en la cárcel. Considera, además, que el Estado no renunciará a ensañarse contra él ya sea por la vía penal o por la económica y pone como ejemplo la resolución del Tribunal de Cuentas, que le exige algo más de dos millones de euros por la internacionalización del proceso.

Aunque ni el aludido ni Junts han confirmado esta intención, el diario asegura que de las tres opciones que baraja el prófugo; regresar a tierras catalanas cuando se reforme el delito de sedición; esperar a otro "tiempo político" o quedarse en territorio belga, en estos momentos se decantaría por la última.

Puigdemont y la nacionalidad belga

Aunque hace semanas Puigdemont manifestó que la inmunidad como europarlamentario --que la Eurocámara la restableció de forma provisional-- "debería garantizar que pudieran regresar sin riesgo" a Cataluña, parece que volver no está entre sus planes.

Eso sí, la inmunidad de la goza es la base del recurso que su defensa ha esgrimido contra la fianza que le reclama el Tribunal de Cuentas en concepto de responsabilidad contable por el presunto uso irregular de fondos de la Generalitat para las embajadas catalanas y el Diplocat.

El ex presidente no ha hecho declaraciones al respecto y, oficialmente, desde Junts se insiste en que no ha tomado ninguna decisión. Puigdemont ha expresado en varias ocasiones que sólo volvería si se respeta su inmunidad como eurodiputado.

Puigdemont cuenta con tres opciones; volver a Cataluña si se rebaja el delito de sedición por el que está acusado; esperar a una nueva situación política, u optar por dejar Cataluña de manera definitiva para instalarse en Bélgica. 

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Con todos esos elementos en la mano, el análisis de Puigdemont se estaría decantado por consolidar su vida en Waterloo como un ciudadano belga, lo que entiende que aumentaría su blindaje frente a las eventuales iniciativas judiciales españolas y le permitiría llevar a cabo con más eficacia su tarea de propaganda separatista.