Colau no permite la celebración de una fiesta por el bilingüismo, pero sí otra por el catalán

 

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau.

El Ayuntamiento de Barcelona rechazó una solicitud presentada por AEB para ocupar la calle por falta de "interés público". Sin embargo, dio luz verde en el mismo espacio a un acto de Som Escola

La polémica del catalán genera situaciones incomprensibles en Barcelona. La alcaldesa de la capital, Ada Colau, prohibió la Festa Escola Bilingüe, que quería organizar la Asociación por una Escuela Bilingüe (AEB), y, en el mismo espacio, permitió poco después, y puso alfombra roja, a la organización independentista Som Escola que pudiese realizar un acto de similares características, con escenario y música incluida. 

Esta última entidad aboga por la enseñanza solo en catalán y exige que se destierre el castellano de las aulas. Es también una de las organizaciones que apoyan la inmersión lingüística y se alinean con las posiciones de desobediencia de la sentencia que dicta que el 25% de las clases ha de ser en castellano.

La presidenta de la Asamblea por una Escuela Bilingüe (AEB), Ana Losada / CG

"Barreras a algunas asociaciones"

Desde la AEB solicitaron un permiso "con un mes de antelación" para hacer el acto Festa Escola Bilingüe el domingo 17 de octubre. La presidenta de la entidad, Ana Losada, explica a Crónica Global que no solo tardaron en responder, sino que lo hicieron tres días antes de que se tuviese que festejar para rechazarlo. Desde el distrito del Eixample se pusieron en contacto con ellos para explicarles el motivo y alegaron que, ese mismo día, se producía la cursa de los Bomberos en ese mismo lugar.

Según Losada, al ofrecerles la opción de hacer el acto cualquier otro fin de semana y buscar "una fecha alternativa", le siguieron "poniendo pegas". Decían que sólo se podían hacer actos en el distrito donde se encuentre la sede y que, ese espacio que solicitaban, "tiene mucha ocupación". Sin embargo, la entidad independentista tampoco tiene sede en ese distrito. .

La presidenta de la AEB asegura que no le cogió por sorpresa porque no es la primera vez que sucede. "El Ayuntamiento de Barcelona pone barreras a algunas asociaciones", denuncia.