El "Brexit" en discusión
La primera ministra de Reino Unido, Theresa May - AFP
El Gobierno de Theresa May se cae a pedazos. A la dimisión este domingo de su ministro para el Brexit, David Davis, se ha sumado este 9 de julio de 2018 la de Boris Johnson, ministro de Exteriores británico. La primera ministra se enfrenta a su peor crisis por la revuelta del sector duro de los conservadores contra su propuesta suave para salir de la UE.
La primera ministra británica se las prometía muy felices cuando el pasado viernes conseguía, dos años después de que el Brexit recibiese el sí en referéndum, poner de acuerdo a su gobierno en torno a una propuesta definitiva a Bruselas. La guerra en el seno del gabinete de May está en todo su fragor. El viernes parecía que las cosas se habían calmado, con el anuncio de un acuerdo para llevar adelante un plan blando de salida de la Unión Europea. Pero la supuesta calma ha saltado por los aires. Habían sido muchos meses de amenazas internas, amagos de dimisión y demostraciones públicas de discrepancia, y al fin gobernaba un Ejecutivo apiñado en torno a una idea, aunque muchos de ellos fueran reticentes. Sin embargo, todo lo conseguido le ha durado 48 horas y se le ha tornado a May en una pesadilla que podría acabar con ella fuera de Downing Street.
El brexit suave que pretende May intenta que Gran Bretaña continúe dentro de la Comunidad Europea informalmente y, formalmente, afuera. Es el resultado de un punto de vista pragmático que intenta dar la razón a ambos para continuar como si no hubiera pasado nada. Los británicos tienen su propia teoría que consiste en la política del compromiso, en especial cuando el asunto es muy complicado de resolver, se ponen en el centro y navegan por ambos lados.Entiéndase bien no es oportunismo sino una forma muy hábil de solucionar un problema difícil.
David Davis, presentaba su dimisión argumentando que no podía permanecer en el Ejecutivo apoyando una idea en la que no cree. Se refería a ese plan, que se presentará el jueves y conocido como «Libro Blanco del Brexit», que abre las puertas a un Brexit suave, con una especie de nueva relación bilateral británico-comunitaria que pone sobre la mesa la creación de un mercado común de bienes.
El brexit duro sigue avanzando más rápido porque el tiempo se acaba y consiste en que tanto formal como informalmente el Reino Unido debe quedar afuera. Por los antecedentes históricos de Gran Bretaña es posible que ahí radique una parte del problema que es el exceso de confianza en su propia independencia, porque el imperio les recuerda cada vez que sea necesario que el mundo es su escenario no la Comunidad Europea, pese a que gran parte de la producción industrial del país se va para el continente.
El "sueño" del Brexit está "muriendo"
En una carta remitida a la primera ministra británica, en la que explica los motivos que le han llevado a dimitir, Johnson afirma que el Brexit "debería ser una oportunidad para hacer las cosas de forma diferente" y "maximizar las ventajas particulares del Reino Unido como una economía abierta, global y con las miras hacia el exterior".
"Ese sueño se está muriendo, ahogado por unas dudas innecesarias", afirma Johnson en la carta, en la que critica que el plan para el "brexit", aprobado de forma colectiva el pasado día 6 por el Gobierno británico, significa que el Reino Unido seguirá sin ser un país "independiente" tras abandonar la UE.
"Nos dirigimos hacia un estatus de colonia, y mucha gente tendrá dificultades para entender las ventajas económicas y políticas de ese acuerdo en particular", sentenció Johnson sobre el plan de May, que todavía no ha sido presentado de forma oficial ante Bruselas.El exministro conservador resaltó que los británicos que votaron a favor del "brexit" recibieron la "promesa categórica y sin ambigüedades" de que podrían "retomar el control de su democracia".
"Se les dijo que podrían gestionar su propia política de inmigración, repatriar las sumas de dinero que actualmente gasta el Reino Unido en la Unión Europea y, por encima de todo, que podrían aprobar leyes de manera independiente, en el interés de la gente de este país".
Un buen sector del electorado británico quiere que se repita el referéndum pero ello es imposible, porque los británicos son fieles a que secumpla lo pactado.
Boris Johnson.EP
Paco Mir
ResponderEliminarEso se veía venir, siempre quieren lo máximo y no saben como.