Catalunya - O susto o muerte
Quim Torra, este martes, en la conferencia política 'El nostre moment'. (Reuters)
Lo lógico hubiera sido que el presidente de un país abriera el curso político ante el parlamento y discutiera su programa con los líderes de la oposición. Pero Cataluña es diferente, cada vez lo es mas. Ayer Quim Torra abrió el curso político mediante una conferencia pública en un teatro ante un público seleccionado previamente previa invitación con la excusa de que el Parlament está cerrado desde hace cuatro meses, gracias al miedo escénico que entró a su presidente Torrent ante las protestas de los diputados de la oposición.
La falta de concreción y el hecho de que fiara la consecución de la república a la "movilización ciudadana", a un "momentum" que considera que podría coincidir con las sentencias por el 1-O, no satisface a los dirigentes de la ANC, Òmnium y la CUP. El presidente de la Generalitat propone una hoja de ruta incendiaria, pero evita cualquier concreción que rompa con la legalidad. O es un cínico o su vena poética le impide ver la realidad, porque insistió en que Cataluña es un país de consensos y que es en esta línea que hacía un discurso no de protesta sino de propuesta.
Torra ha declarado que no contempla la convocatoria de elecciones "porque pienso que ni es el momento ni tendría lógica que fuéramos a una 'marcha', a toda una serie de acciones, con un foro cívico constituyente, para acabar de repente con unas elecciones".
A Bruselas para rendir cuentas al amo
Hoy Torra ha viajado a Bruselas donde le toca recibir la últimas instrucciones de Puigdemont, que impartirá doctrina durante dos días a los miembros de su grupo parlamentario, Junts per Catalunya para iniciarles en la "hoja de ruta" para los próximos meses donde .
"Mi única lealdad y obediencia es al Parlament de Cataluña, que sigue cerrado, ha asegurado Torra. ha asegurado Torra, junto a Puigdemont. "Estoy dispuesto a llegar tan lejos como llegó el presidente Puigdemont". Lo ha dicho Quim Torra, el presidente de la Generalitat, en Bruselas. Junto a su predecesor, Torra ha dejado claro que su referencia no es otra que "el pueblo catalán" y que no dudaría a la hora de ignorar al Estado central. "Mi única lealdad y obediencia es al Parlament de Cataluña", ha repetido Torra.
Puigdemont y Torra durante su encuentro en Bruselas (EFE)
No fue el caso ayer del 'president' Torra. Con el Parlament cerrado, eligió una conferencia ante los dirigentes del dividido movimiento independentista —por eso está cerrado el Parlament, porque Puigdemont y ERC discrepan—, pero optó por no hablar como el dirigente de un partido o de una agrietada coalición gubernamental —a lo que hubiera tenido todo el derecho—, sino que se erigió en el legítimo líder de Cataluña, o sea de todos los catalanes, reivindicando las creencias y los objetivos de, como máximo, el 47,6% de catalanes que votaron independentista en las elecciones del pasado diciembre.
Torra lanza un ultimátum al Gobierno
Torra afirma que el referéndum del 1 de octubre es el punto de partida y que no habrá ninguna renuncia. Es el gran error de Torra y gran parte del secesionismo, confundir el 47%, que es mucho, con toda Cataluña. O sea, intentar apoderarse de toda Cataluña con el 47% del voto que le facilita una escasa —y dividida— mayoría absoluta parlamentaria. Y desde esta premisa falsa el quiere plantear al Estado una serie de exigencias que califica de justas e irrenunciables (o libertad o libertad).
Tanto Torra como Puigdemont han pedido también a los catalanes que participen de manera "masiva" en la Diada que se celebra el día 11, en un año en el que la situación en Cataluña es "extraordinaria" debido a que aún se encuentran en prisión buena parte de los miembros del anterior ejecutivo catalán. Mientras Ada Colau quiere ayudar anda reclutando "manteros" para rellenar los huecos para la manifestación ante un probable bajón de la participación de los independentistas que cada día que pasa, ven mas lejos el paraíso prometido.
Diego Ruiz Saavedra
ResponderEliminarSánchez y Torra. Muchas fotos y paseo por la Moncloa. El Cascabel. Antonio Jiménes. Dos traidores que en otro País estarían ahorcado y exterminado de la faz de la tierra como Políticos y como seres humanos; por el mal y la destrucción que están causando. Dos mamonas de mierda que hay que exterminar borrar de la faz de la Sociedad humana.
Joaquin Romero Lopez
ResponderEliminaruna cosa esta clara que ya no pueden echarse atras ,por que entonces se los comeran vivos todos esaspersonas que les siguen .
Jose Folgar Farto
ResponderEliminarA la horca con los NAZIS
Francisco Fariña Trigo
ResponderEliminarLo tonto no tiene cura
Maite Andaluz
ResponderEliminarQue te encierren que estás loco
Darayavus Frags
ResponderEliminarNo, señor. Condones con la bandera de España...
Pilar Ortiz Cora Pilar
ResponderEliminarAl chistorra le va más, o suto o muete, pega más con su estilo. Al fin y al cabo, es un medio lelo el que lo dice, y el chistorra, es lelo del todo!!’
Carlos Soler
ResponderEliminarPero que pueblo unido, una parte del pueblo que no llega al 40% como delirais dios mio
Josefa Morales
ResponderEliminarEs hora de terminar con esta pesadilla
Manuel Marin
ResponderEliminarMuerte no la deseo a nadie, pero un suste grandisimo si se lo deseo a este NAZI