Sánchez necesita un gobierno para julio

Sánchez con Casado. | David Mudarra

Pedro Sánchez, junto a su asesor, Iván Redondo

Empieza la semana crucial para la investidura de Pedro Sánchez en la que se va decidir la fecha y si acudirá a ella junto a Podemos o confiando en repetir los apoyos obtenidos en la moción de censura a Rajoy. Ante el voto en contra de Ciudadanos y PP, los números no salen Si el presidente lograra un pacto con Iglesias su elección en julio podría estar resuelta.  El propio Sánchez lo dijo en Osaka (Japón) públicamente: "España necesita un Gobierno de cooperación en julio". En todo caso si el presidente del Gobierno en funciones no supera en julio la primera investidura, "no irá a otra en septiembre".

Un gobierno lógico salido de estas elecciones que podría durar toda la legislatura sería la combinación PSOE - Ciudadanos, siempre que Pedro Sánchez y Albert Rivera decidieran pactar. Haria solo falta una oferta interesanta de Sánchez. Pero tanto uno como otro han prometido a sus afiliados cumplir con sus promesas de no pactar bajo ningún concepto.

Fuentes populares cercanas a Pablo Casado creen que Pedro Sánchez no estaría dispuesto a someterse a una segunda vuelta en septiembre, lo que abocaría al país a unas nuevas elecciones. "Se va a presentar a una investidura en julio, y si no sale bien, no irá a la de septiembre. Dejará correr el tiempo hasta elecciones", creen en Génova.

Después de que Pablo Casado se haya reunido con Pedro Sánchez en dos ocasiones en el último mes, en el Partido Popular están convencidos de que En Génova creen que el líder del Ejecutivo va a llevar su "duelo" con Pablo Iglesias hasta "el final".

El presidente en funciones se guarda esa baza en la negociación para conformar un gobierno de cooperación, que en estos momentos se encuentra encallada, Pedro Sánchez y Pablo Iglesias darán una nueva oportunidad al acuerdo de gobernabilidad, con otra reunión en los próximos días, después de que el presidente del Gobierno en funciones comunique este martes a la presidenta del Congreso la fecha en la que se someterá a la investidura.

Los socialistas mantienen aún vías abiertas de salida al conflicto, en un momento en que el escollo para salvar la investidura radica sólo en el voto de Unidas Podemos, ya que formaciones como JxCat, ERC y EH Bildu se han mostrado favorables a la abstención. Si el presidente logra un pacto con Iglesias su elección en julio podría estar resuelta. No es la suma de apoyos directos e indirectos que el PSOE pretendía, pero sí la única posible tras desdeñar el acuerdo con UPN. Ante esta opción el Gobierno se afana en transmitir que estas abstenciones se producirán sin negociar nada a cambio

El monopolio de Redondo en las negociaciones de Sánchez con Iglesias irrita al PSOE y Podemos, Ábalos ve conveniente dejar a Podemos altos cargos en la administración, pero no ministros, y Redondo propone una segunda convocatoria electoral. Pedro Sánchez piensa continuar por su camino sin dar a Podemos puestos en el Consejo de Ministros, tal y como piden los morados a cambio de su apoyo en la próxima investidura, es mas, ni siquiera le ha dicho a Pablo Iglesias qué cargos le ofrece. Podemos por su parte quiere evitar otras elecciones.

Las encuestas señalan que, de repetirse los comicios, el PSOE subiría en escaños. Los estudios demoscópicos apuntan al efecto de la segunda vuelta, en la que los electores suelen decantarse por el voto útil hacia partidos mayoritarios. De ese esquema, también el PP se vería beneficiado. De aquí las dudas de Ábalos, que teme que un desplome de Podemos pueda favorecer una mayoría alternativa de la derecha.