Yolanda Diaz, la candidata del nunca jamás

Yolanda Díaz se descuelga 'in extremis' de un homenaje a Anguita para alejarse de Andalucía. La ministra de Trabajo evitó asistir en Córdoba a un acto a favor del ex líder de IU. Quiere medir al milímetro su exposición en las autonómicas andaluzas

El CIS de Tezanos le ha dado a Yolanda Díaz como la política preferida por los electores. Según su punto de vista es la política mas prometedora de todo el espectro nacional.

Desde su fracaso gallego, que mandó al BNGA y a Beirás al ostracismo, cuando llega cualquier confrontación regional lleva años evitando las campañas, Lo hizo en Madrid, lo repitió en Castilla y León y ahora en Andalucía, Sigue anunciando su aparición para las próximas con una plataforma llamada Sumar ¿con la Otra y la Colau? Sabe ya que tiene las de perder, pero mientras le dure el apoyo interesado de Sánchez, puede mantener la ilusión de los descolgados de Podemos.  

 

El pasado fin de semana evitó acudir a un homenaje al ex líder de Izquierda Unida Julio Anguita en Córdoba que contaban con su presencia,. La organización del evento explica que Díaz anuló su viaje «el día antes» Ese día, la ministra viajó a Santiago de Compostela con Falcon gubernamental  para la toma de posesión del nuevo presidente de Galicia. La ausencia de Díaz del homenaje a Anguita se enmarcaría en su deseo de descolgarse de la campaña autonómica andaluza. El día siguiente estuvo en la Pradera de San Isidro para las fiestas de Madrid donde se fotografió con Íñigo Errejón y Mónica García y Rita Maestre de Más Madrid.

El círculo de afines coincide en que es oportuno evitar patinazos en esta fase de construcción de una precandidatura. Y las autonómicas andaluzas solo pueden generar problemas. «Díaz quiere que todo el espacio, con Podemos en la primera línea, se queme y llegar ella para construir sobre esas cenizas su proyecto», resumen desde el sector más cercano a la ministra de Trabajo.

Nadie duda de la inteligencia de Yolanda Díaz y de su capacidad para embarcar a la tropa con su lenguaje suave que puede fluir durante horas sin decir nada a esta izquierda que no duda en  enrolarse para aventuras imposibles y acabar borracha en cualquier taberna de puerto.