Sanchez de precampaña en Andalucia junto a Neflix, acusando a la derecha de corrupción

Pedro Sánchez en Dos Hermanas

Sánchez opta por los viejos mantras de la izquierda para evitar el "siniestro andaluz"

El líder del PSOE ha repetido la lista habitual de insultos y ataques a la derecha como única vía para tratar de esquivar el batacazo que las encuestan pronostican para el PSOE el 19-J

Después de una semana marcada por las traiciones de su socio de gobierno, Unidas Podemos, evitando apoyar leyes como la del sector audiovisual, o por los chantajes de sus socios secesionistas, Pedro Sánchez viaja a Sevilla para hacer campaña: Esta vez no en el Falcon,ha acudido en AVE rodeado de cámaras de Netflix, para rodar su documental de la plataforma. De allí ha acudido a un mitin en Dos Hermanas para tratar de frenar el “siniestro andaluz” del PSOE en las elecciones del próximo 19 de junio.

Sánchez ha participado este sábado para la campaña de Andalucía de un desubicado Juan Espadas, al que han arropado numerosos ministros como el de Presidencia, Félix Bolaños; Hacienda, María Jesús Montero; Agricultura, Luis Planas, o Industria, Reyes Maroto, ante los malos datos que pronostican los sondeos (y los propios datos que manejan en Ferraz) el 19 de junio, se lanza a Sánchez como única esperanza para reflotar la precampaña.

En su discurso, Sánchez no ha tirado de retórica nueva y ha decidido sacar la libreta de viejas acusaciones a la derecha: corrupción, ataques infundados, insultos, etc. Un discurso en el que, una vez más, ha vuelto a señalar que la izquierda es la única opción de la clase trabajadora para “conquistar” derechos. Ha reivindicado los logros de la legislatura: salario mínimo, reforma laboral o revalorización de las pensiones

Duras acusaciones

Sánchez ha acusado al PP de protagonizar tres tipos de corrupción: financiera, política y "la corrupción de la democracia"

Y como era de esperar, Sánchez ha usado como ataque al Partido Popular sus casos de corrupción en las que nada tenía que ver el actual líder de los populares, Alberto Núñez Feijóo, y que ya están sentenciadas por la Justicia. “Con la derecha siempre es lo mismo, cuando están en el gobierno hay corrupción y en la oposición crispación. Tenemos una derecha que practica la corrupción de la democracia. Creen que todo es suyo y cuando llegan al poder utilizan las instituciones para su beneficio y mantenerse en el poder”, ha dicho vilipendiando a la derecha, aunque para mantenerse en el poder, él pactó con Bildu y Esquerra.

Para Sánchez hay “tres tipos de corrupción”: la financiera, que permite al PP financiarse de manera ilegal; la política, que les permite utilizar a las instituciones en su propio beneficio; y la más importante de las tres, “la corrupción de la democracia” que lleva a los populares a tachar de ilegítimo a un presidente y su gobierno.

“Esa es la derecha de la corrupción de la democracia porque si alguien cree que la Constitución es suya, la bandera es suya y el país es suyo, lo que hace es usar las instituciones y la corrupción para mantenerse en el poder”, ha resumido.

"La lucha contra la desigualdad es el deber al que nos tenemos que comprometer todos y todas. Por eso es tan importante la existencia del PSOE, porque tenemos que echar una mano a quien más lo necesita, que son los más vulnerables”, ha señalado Sánchez en la comunidad en la que su partido utilizó fondos públicos destinados a los parados para culminar la mayor trama de corrupción de la historia de la democracia.

Pero Sánchez ha ido un paso más allá y ha dejado ver que la derecha, directamente, no es democrática: “Cuando hay incertidumbre la izquierda protege mientras que la derecha recorta. Esa es la gran diferencia. Socialismo es democracia y compromiso con lo público, con lo social”.

“¿Por qué el PP siempre vota en contra y por qué no cumplen con sus obligaciones constituciones?”, se preguntaba Sánchez olvidándose de que fue el PSOE el que mantuvo bloqueadas las negociaciones con el PP para renovar el Consejo General del Poder Judicial ante las presiones de Podemos para incluir en el órgano a jueces próximos.

"Cuando está en la oposición, el PP practica la corrupción de la democracia. No reconocen el resultado electoral y tratan de ilegítimo a un gobierno y a un presidente elegido por las urnas”, ha subrayado Sánchez en un interno de desprestigiar a la oposición.

La culpa de la crisis, de Rusia y el covid

Por otro lado, el líder de los socialistas ha vuelto ha echar balones fuera eludiendo su responsabilidad como presidente del Gobierno. Y para ello, ha intentado salvar su gestión asegurando que la crisis económica que estamos viviendo no es por culpa en parte de su terrible gestión.

Para los organismo internacionales que dicen que España irá a la cola de la recuperación, Sánchez asegura que no es por su culpa, sino por la pandemia, el covid y la guerra. Y tiene solución para ello: más subvenciones. “A pesar de la pandemia, la guerra y el volcán, el Gobierno ha aprobado 5.500 millones de euros para una FP digna, hemos aprobado la Ley para defender a las mujeres y hemos subido las pensiones conforme al IPC”, ha espetado Sánchez, dejando patente el caos retórico que profesa.