Una estructura de un Estado que no se puede soportar

El estado de alarma y el deficiente control al Gobierno ejercido por el Congreso centrado en la urgencia de la pandemia y paralización económica del país no podido evitar que se tomen decisiones nada urgentes y en dirección totalmente contraria a los tiempos que se avecinan, donde el Gobierno toma la via del despilfarro con decisiones tomadas por la vía de ordeno y mando exclusivamente de Pedro Sánchez y su vicepresidente Pablo Iglesias.

Al gobierno mas numeroso de todos los tiempos con 4 vicepresidencias y 22 ministerios, muchos de ellos sin una competencia clara de sus funciones, salvo el interés ideológico. A crear estructuras nuevas e innecesarias se han dedicado con todo ahinco la izquierda gobernante de este país. Mientras fallecen miles de personas y varios millones ya se han quedado sin trabajo, no tienen ningun rubor para seguir engrosando los gastos de una administración gigantesca e ineficiente colocando al máximo número de activistas, palmeros y otras especies políticas que en algunos casos no habían desempeñado en su vida  un cargo de responsabilidad.

De acuerdo con la estructura de los departamentos ministeriales diseñada por el Gobierno de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias se esta desarrollando a toda marcha. Se han creado nuevas Direcciones Generales para engrosar los nuevos ministerios y en 23 de ellas, han decidido que no sea necesario siquiera ostentar la condición de funcionario,

Este es el caso de la presidencia del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) como pago de PSOE a las encuestas cocinadas de Tezanos o la Oficina Española de Cambio Climático (OECC). el órgano directivo que tiene atribuidas las funciones dirigidas a la prevención del cambio climático- el puesto exige de unos conocimientos específicos y requerimientos y experiencia técnicos que "justifican que su titular no sea necesariamente un funcionario público".

Esta circunstancia es además aplicable a los titulares del Instituto de Mayores y Servicios Sociales (IMSERSO), de la Dirección General del Instituto de Turismo de España (TURESPAÑA) y al de la Dirección General del Instituto de la Juventud (INJUVE). 

Lo mismo ocurre con otras direcciones generales, como es el caso de aquellas integradas en la Agenda 2030, que controla Unidas Podemos: la de Derechos de los Animales, la de Migraciones, la de Inclusión y Atención Humanitaria, la de Igualdad de trato y Diversidad Étnico Racial, la de Diversidad Sexual y Derechos LGTBI o la de Consumo por la parte que le toca al pago al apoyo de Pablo Iglesias y sus confluencias.

Tampoco será necesario ser funcionario en el caso de la dirección general de Comunicación, la de Diplomacia Pública y Redes; de Infraestructura; de Tráfico; de Agenda Urbana y Arquitectura; del Trabajo Autónomo y de la Economía Social y de la Responsabilidad Social de las Empresas.

La misma situación concurre en el caso de la dirección general de Política Energética y Minas; del Libro y Fomento de la Lectura; de Industrias Culturales, Propiedad Intelectual y Cooperación; de Cartera Básica de Servicios del Sistema Nacional de Salud y Farmacia; de Derechos de la Infancia y de la Adolescencia y la de Políticas Palanca para el Cumplimiento de la Agenda 2030.

Frente a este irresponsable y timorato consenso que lo fía todo a disparar el déficit y el endeudamiento públicos, sólo Vox ha planteado una propuesta para eliminar diez ministerios y tres vicepresidencias y elaborar una auditoría a la "mastodóntica" estructura del Gobierno. 

Así las cosas, o se empieza ya a elaborar un ambicioso y valiente plan de austeridad que reduzca la presión que la mastodóntica Administración ejerce sobre el cada vez más empobrecido y reducido número de contribuyentes netos, o será Bruselas la que, más pronto que tarde, venga con las tijeras. Los países del norte de Europa no parecen dispuestos a pagar la barra libre del endeudamiento público. Menos aún cuando el Gobierno social-comunista, ante una noticia como la de que en abril ya había 7 millones de personas en el paro o sometidas a ERTE, en lugar de lamentarse o preocuparse se vanagloria por haber alcanzado el "record histórico" de 5,2 millones de prestaciones por desempleo, por un valor superior a los 4.500 millones de euros...