¿Y ahora qué?

Artur Mas con su lista “Junts per el Si” o Junts per el X% se ha dado el gran batacazo, a pesar que ha ganado las elecciones, no ha logrado obtener la mayoría que decía hace unos días era imprescindible para seguir con la hoja de ruta para la declaración de la independencia. Los millones gastados en la movilización, plataformas, embajadas, propaganda, ayudas económicas a la prensa amiga, el Barca, El Español, los esfuerzos adoctrinadores en escuelas, Pep Guardiola, Karmele Marchante o Lluis Llach no han sido suficientes y han resultado ser un derroche inútil ya que los secesionistas no han podido doblegar a una Constitución que es la garantía para que no se produzca el desmembramiento de España.

Por mucho que presuman los independentistas, esta postura no ha hecho más que descender por mucho que Artur Mas diga lo contrario, de una mayoría de 68 escaños, en el 2012 ERC y CIU juntos obtuvieron 71 y con la CUP ahora mismo obtienen 72 cuanto los tres entonces obtuvieron 74. Con el 48% de los votos de independentistas y el 52% en contra de la independendencia que tipo de política va a desarrollar este nuevo gobierno, si llega a constituirse.

Las elecciones en Cataluña dejan a Artur Mas en una suerte de limbo. En su viaje hacia la independencia, a su Ítaca, se embarcó en una lista conjunta con ERC y las entidades civiles proindependencia -ANC y Òmnium Cultural- y ahora necesitará de la complicidad de la CUP para arrancar su hoja de ruta hacia la desconexión con España. Lo único que ha conseguido es romper en dos a Cataluña. Y con la legitimidad más que cuestionada por no haber alcanzado, sumando a la CUP, ni el 50% del total de votos emitidos. Y esperando el apoyo de una CUP que se ha cansado de repetir que ellos no aceptan que Mas sea presidente por corrupto. 

El panorama presenta un Parlament ingobernable con seis partidos totalmente irreconciliables. Junts X% solo puede pactar en el tema secesionistas con las CUP un partido radical anti europeo y proetarra,  que ha dicho por activa y por pasiva que  no va a admitir negociar mientras Mas sea el candidato. Acusado su partidos de casos de corrupción y a la espera de nuevas imputaciones lo va a tener dificil con Ciudadanos enfrente triplicando sus votos a cada elección, va a ser el primer partido de oposición los independentistas deberán reflexionar muy bien en los próximos pasos a dar. 

Sin la mayoría de votos en contra de la desmembración de España, ¿Será Artur Mas finalmente el Presidente de la Generalitat?, ¿Se va a atrever Artur Mas seguir adelante con su locura? Porque resulta que con él como capitán ya se ha comprobado que no se va a ninguna parte. La única duda es si se se lo van a merendar la ensalada de radicales de izquierda que ha tenido por compañeros de viaje o lo que a lo mejor no haría falta que mandar la guardia civil,  yo mas bien estaría pensando en los loqueros.