Sánchez confirma que subirá masivamente los impuestos: 20.000 millones más al año.

.

El Gobierno de Pedro Sánchez ya ha enviado a Bruselas su plan para contener el déficit público. 

Lejos de las exigencias de la Comisión Europea en las que se instaba a reducir gasto, el plan socialista pasa por subir impuestos de manera abrumadora. En el Plan de Estabilidad 2019-2022, Sánchez espera aumentar la recaudación 1,9 puntos más sobre el PIB. Mientras Bruselas ha elevado esta semana el déficit de España en 2019 al 2,3%, tres décimas más que lo que calcula el Gobierno y prevén que se incumpla el objetivo para este año.

Varias instituciones nacionales e internacionales así como centros de estudios desmontan el plan y las previsiones económicos de Pedro Sánchez. Así, mientras que el Banco de España alerta de la indefinición de la política fiscal, la Comisión Europea critica que la política de gasto expansiva subirá el déficit estructural.

Actualmente esa recaudación está situada en un 38,9% sobre el Producto Interior Bruto de España y el plan establece un aumento progresivo hasta un 40,7% durante la legislatura. En los últimos presupuestos que Sánchez presentó ante las Cámaras ya se pudo comprobar como trató de aumentar los ingresos en 6.000 millones a costa del resto de españoles, pero el plan no fructificó.

El aumento será progresivo, con 5.000 millones de euros durante 2019, y llegando al aumento de 20.000 millones durante el año 2022. Lógicamente, aumentar la recaudación pasa por subir impuestos. El plan de Sánchez establece la imposición de la famosa Tasa Tobin, la subida de los nueve céntimos por litro de diesel, la subida del IRPF y un aumento del impuesto de sociedades. 

La subida del diesel, que afectaría a 13,5 millones de vehículos y casi 12 millones de familias, llevaría a un aumento de entorno a un 7% el gasto mensual en combustibles. Además, el aumento del impuesto de sociedades pondría en jaque la creación de empleo.